"Antes de que sepamos que podemos soñar lúcido, tal actividad no se nos plantea. Una vez que se nos revela el tema, comenzamos, primero lentamente y luego con más y más frecuencia, a pensar en él durante el día y a prepararnos para la noche. El soñador tiene memoria, se recuerda lo que se propuso durante la vigilia y es muy posible que lo realice. Fui poco a poco, con una paciencia inagotable, durante años, conquistando el mundo onírico. No le doy al término 'conquistar' el sentido de ganar una batalla o un territorio. Conquistar para mí es vivir en su plenitud el mundo de los sueños, que no tiene fin."
5 comments:
yuck.
no quiero pensar en la adición de fosforitos para la hamburguesa...
Esto es lo mejor que me ha pasado hoy. Así de bueno está el día. Ojo, quizá en dos horas la vaina mejore.
Aranta: Vivan los fosforitos.
Chino Patiño: ¿Cómo así? ¿Qué iba a pasar dos horas después?
Bah, se nota que no conoce el taller de mecánica automotriz "El loco".
Camilo le puede dar referencias.
Don Diego, un honor ver su rastro por acá.
No, no conozco ese lugar. Espero que nos veamos pronto pa' que me cuente la historia.
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